CARTAS AL EDITOR

 

El modelo circumplejo tridimensional (3-D): sobre las mediciones no-curvilíneas del FACES-III

The circumplex three-dimensional (3D) model: on the non-curvilinear FACES-III measurements

 

Juan Carlos Bazo-Alvarez1,2,a, Oscar Alfredo Bazo-Alvarez2,3,b, Jeins Aguila2,c, Frank Peralta2,d, Wilfredo Mormontoy4, e, Ian M. Bennett5,f

1 Methodology Research Group, Department of Primary Care and Population Health, University College London (UCL), London, UK.
2 PSYCOPERU - Instituto de Investigación y Capacitación para la Prevención y Promoción Psicoeducativa y Psicosocial. Lima, Perú.
3 Escuela de Medicina Humana, Facultad de Ciencias de la Salud, Universidad Privada San Juan Bautista. Lima, Perú.
4 Departamento de Estadística, Demografía, Humanidades y Ciencias Sociales, Facultad de Ciencias y Filosofía, Universidad Peruana Cayetano Heredia. Lima, Perú.
5 Department of Family Medicine, School of Medicine, University of Washington. EE. UU.
a Maestro en Investigación Epidemiológica; b Médico Cirujano; c Licenciado en Psicología; d Licenciado en Biología; e Maestro en Salud Pública; f Doctor of Philosophy.

 


Sr. Editor. La presente es nuestra respuesta a la carta titulada "¿Es necesario un análisis completo del perfil del FACES-III?", la cual agradecemos.

Las 16 tipologías familiares son importantes, pero no son la piedra angular del modelo circumplejo. El modelo se construye con base en las dos dimensiones (cohesión y flexibilidad); si estas son ortogonales, se forma el sistema cartesiano que genera los tipos familiares. Esto no ocurre en el sentido opuesto. Más aun, en el modelo original la evidencia de funcionalidad también se fijó para los niveles de cada dimensión por separado (1). Tras nueva evidencia, en 1991, Olson actualizó su modelo haciendo de la funcionalidad una tercera dimensión que señala el tránsito entre los "sistemas familiares" (2). En este modelo, el FACES-III ya no genera mediciones curvilíneas, sino lineales. Esto implicó un cambio radical en las interpretaciones: "Altos puntajes en las escalas de cohesión y flexibilidad son indicativo de sistemas balanceados, mientras que puntajes bajos en las mismas escalas son reflejo de sistemas desbalanceados" (3). De hecho, Kouneski (4) construye una tabla que facilita la nueva interpretación (Tabla 1) donde la funcionalidad sigue siendo atribuible directamente a cada dimensión, tal y como lo propusimos en nuestro artículo. En este Modelo 3-D los tipos familiares también exigen ortogonalidad, y en su ausencia la cohesión y flexibilidad son perfectamente interpretables. Además, desde el inicio, Olson presentó índices de confiabilidad, normas de calificación y criterios de interpretación de cada escala por separado (1). Kouneski ha listado más de cien investigaciones donde se estudia estas dimensiones (en forma separada) y su relación con outcomes de salud familiar (4). Su uso con fines clínicos también es viable (3), de preferencia usando simultáneamente la Clinical Rating Scale.

 

 

Esta versión es confiable e interpretable, aunque otros estudios sean igualmente oportunos. Ya hemos presentado la confiabilidad de estas escalas para adolescentes peruanos, estimada con un método similar al usado por Olson (1,4), cuyos puntajes deben ser interpretados a la luz del modelo circumplejo 3-D. El ρd=.46 mostrado por los colegas en su carta, no es aplicable al uso regular de las escalas de cohesión y flexibilidad, pues corresponde a la confiabilidad de las puntuaciones diferencia de dos mediciones continuas. Las puntuaciones diferencia no son una transformación válida e interpretable en el manual del FACES-III (1). Para una mejor comprensión de la técnica se recomienda leer a Martínez (5). Futuros estudios locales del FACES-III podrían evaluar la ortogonalidad con una muestra grande que incluya a más de un miembro por familia. Si la ortogonalidad se verifica, los tipos familiares recuperarían buena parte de su utilidad.

Contribuciones de los autores: JCBA, OABA, JA, FP, WM e IB han participado en la concepción y diseño del artículo, su redacción y aprobación de la versión final. Además, JCBA y JA participaron en la recolección de datos. JCBA realizó los análisis estadísticos y obtuvo el financiamiento.

Fuentes de financiamiento: financiamiento del Instituto de Investigación y Capacitación para la Prevención y Promoción Psicoeducativa y Psicosocial – PSYCOPERU.

Conflictos de interés: los autores declaran no tener conflictos de interés en la publicación del artículo.

 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

1. Olson DH, Portner J, Lavee Y. Family Adaptability and Cohesion Evaluation Scales (FACES III). Minnesota: University of Minnesota; 1985.

2. Olson DH. Commentary: Three-dimensional (3-D) circumplex model and revised scoring of FACES III. Fam process. 1991;30(1):74-9. doi: 10.1111/j.1545- 5300.1991.00074.x.

3. Olson DH. Circumplex model of marital and family sytems. J Fam Ther. 2000;22(2):144-67. doi: 10.1111/1467-6427.00144

4. Kouneski EF. The family circumplex model, FACES II, and FACES III: Overview of research and applications. Twin Cities: University of Minnesota, 2000.

5. Martínez Arias R. Psicometría: Teoría de los tests psicológicos y educativos: Madrid: Síntesis; 1995.

 

Correspondencia: Juan Carlos Bazo Álvarez.
Dirección: Departamento Académico de Estadística, Demografía, Humanidades y Ciencias Sociales,
Facultad de Ciencias y Filosofía Alberto Cazorla Talleri, Universidad Peruana Cayetano Heredia.
Av. Honorio Delgado 430, Urb. Ingeniería, San Martín de Porres, Lima, Perú.
Correo electrónico: juan.bazo.a@upch.pe

Recibido: 20/01/2017
Aprobado: 25/01/2017
En Línea: 23/03/2017